Agricultores piden policías y fiscalías especializadas en delitos perpetrados en zonas rurales

Debido al incremento en los robos en la zona, se ha solicitado a las autoridades que mantengan patrullajes en las zonas tanto urbanas como rurales.
La noche del jueves 15 de agosto pasado, personal de la Sección de Investigación Policial (SIP) de Carabineros de Los Ángeles indagó un millonario robo que afectó al local comercial Tattersall, en el área urbana de la comuna de Los Ángeles.

El hecho se registró en Avenida Las Industrias, a la altura del kilómetro 510 (salida norte de la ciudad), cuando un grupo de antisociales, saltando la reja perimetral, sustrajo una máquina fumigadora para huertos frutales. El audaz atraco significó una pérdida de 14 millones de pesos que corresponde al avalúo del equipo sustraído. Al respecto, el presidente de la Sociedad Agrícola de Biobío (Socabío) José Miguel Stegmeier, aseguró que ese incidente 'se suma a múltiples robos de cables de pivotes de riego, maquinarias, agroquímicos, etcétera, en diversos predios agrícolas de varias comunas de Biobío', a los que se añaden los delitos de abigeato (robo de ganado) que 'no se han podido controlar'.

A juicio del dirigente, se trata de una situación que ocurre hace muchos años en las zonas campesinos, a lo largo y ancho del país: 'Hemos sostenido reuniones con autoridades el Ministerio del Interior, policías e incluso con el fiscal nacional, para conseguir aquellas medidas y políticas públicas que controlen esto'. Stegmeier dijo que para este tipo de actos 'es esencial disponer de policías y fiscales especializados en delitos rurales, de tal manera que se pueda detener a quienes realizan estos actos criminales, sino que también investiguen a quienes reciben o encargan estos bienes robados'. El productor hizo ver que 'quien recibe o compra lo sustraído, lo más probable es que sea también agricultor o proveedor de la agricultura. Pasa exactamente lo mismo con las maquinarias, como lo fue por ejemplo lo ocurrido en el Tattersall de Los Ángeles'. Esta situación también la extrapoló para los casos del abigeato en que ha llegado ganado robado en Biobío a ferias ganaderas de la Región Metropolitana, mientras que los animales faenados se destinan a la venta ilegal de carne, 'con todos los riesgos sanitarios que esto implica', advirtió.

CAMPO SEGURO

Por otro lado, el gerente de la ONG Campo Seguro, Francisco Muñoz, reconoció que ese tipo de delitos son frecuentes a nivel nacional: 'Hemos tenido robos en centros de distribución en bodegas, particularmente de fertilizantes y otros insumos de venta'. 'El robo de maquinaria ha sido frecuente, directamente sobre productores. Maquinarias y sistemas de regadío han sido sustraídos desde los sectores rurales', apuntó. Muñoz agregó que 'ahí nuestra solicitud a las autoridades y Carabineros ha sido mantener los patrullajes en zonas urbanas y rurales'. Destacó que aunque 'hoy contamos con patrullas de vigilancia rural', también puso acento en que los productores afectados 'realicen las denuncias para tener una base de datos y que las investigaciones den frutos'.

Francisco Muñoz dijo que en el caso de maquinaria robada, los productores podrían 'comprar bienes sin conocer su origen. Ahí hacemos hincapié en que la receptación de una especie proveniente de un delito es sancionado por ley'. Por lo mismo, recalcó que 'nuestro llamado es a tomar la precaución a la hora de comprar bienes, particularmente a través de portales electrónicos, que también se prestan para estafas'. El gerente de la ONG recordó que 'en el caso de los tractores, deben contar con la factura respectiva y el permiso de circulación, documentos que deben ser exigidos al momento de comprar un bien'. Asimismo, abogó por 'una mayor fiscalización en las rutas secundarias por parte de Carabineros o la exigencia de la guía de despacho en el transporte de insumos'.