Innovación y tecnología para reposicionar a Chile como potencia mundial en frambuesas

23 septiembre 2016

Con un cuestionamiento a la falta de innovación y tecnología en el sector productivo nacional de berries, el consultor Felipe Rosas concluyó la charla ?Perspectivas de la próxima temporada? que presentó en el seminario ?El Mercado de la frambuesa orgánica? organizado por INIA Quilamapu en Chillán.

Rosas sostuvo que la escasez de tecnología, especialmente la falta de mecanización durante todo el proceso productivo, es lo que nos impide alcanzar grandes volúmenes necesarios para competir con los países líderes del mercado mundial de frambuesas, como Polonia, Serbia y Estados Unidos.

El profesional de la empresa Rconsulting Group, destacó que el retraso tecnológico ha llevado al país a producir (entre frambuesas convencionales y orgánicas) casi la mitad de lo que producía hace 10 años, pasando de las 62 mil toneladas en 2005/2006 a las 37 mil toneladas actuales.

En cuanto a precios, indicó que en la temporada 2016/2017 el precio a productor oscilará entre los mil y mil 100 pesos el kilogramo, enfatizando que no se repetirán los precios de inicio de la temporada pasada. Recalcó también que el valor de la frambuesa orgánica se empinará unos 0,8 dólares por kilo por sobre el de la convencional.20160316_152837

Finalmente, en cuanto a los berries en general (arándanos, frutillas y frambuesa), hizo hincapié en la necesidad de usar otras variedades que permitan la mecanización de la cosecha, con el fin de lograr mayores producciones que son necesarias para reposicionar a Chile como potencia productora mundial.

Cabe señalar que Chile poseía en 2015, algo más de 3 mil 400 hectáreas de frambuesas, concentrándose su producción en las regiones del Maule (1.300 ha) y del Biobío (1.280 ha).

Seminario

Más de 110 personas, entre productores de berries orgánicos, profesionales de servicios del agro, además de representantes de diversas empresas privadas relacionadas con el rubro, asistieron al seminario realizado recientemente en el contexto del nodo de frambuesa orgánica, que ejecuta INIA Quilamapu con financiamiento Corfo hace un año.

Fue la encargada del nodo, Julieta Parada, quien abrió la ronda de presentaciones al exponer las ?Estrategias de transferencia tecnológica y extensión en la producción de berries?. La agrónomo de INIA dio a conocer las distintas actividades realizadas en torno al rubro, destacando el programa de fitotecnia que impulsa el INIA Quilamapu en las regiones del Maule y del Biobío; el proyecto de valorización de la frutilla blanca en Nahuelbuta; el proyecto territorial de berries; el grupo de transferencia tecnológica (GTT) de Los Ángeles; y el Nodo de Producción y Comercialización de Frambuesa Orgánica de la Región del Biobío, entre otros.

Los desafíos de la certificación orgánica


En tanto, el Director Ejecutivo de la empresa certificadora BioAudita, Luis Meléndez, destacó la gran cantidad de asistentes al seminario, lo que ?muestra que la Región (del Biobío) lidera la producción orgánica del país?. Meléndez expuso el ?Sistema de gestión para la certificación orgánica?, señalando las altas exigencias que debe cumplir un productor orgánico además del estricto proceso de verificación de las exigencias que establece la empresa certificadora. Todo ello con el fin de identificar a aquellos productores fraudulentos que intentan sacar provecho del creciente mercado.

El también agrónomo destacó la importancia de la certificación para los agricultores, lo que respalda el cumplimiento de un sistema de gestión asociado a la producción. Asimismo, recalcó que el productor debe estudiar acuciosamente las regulaciones del país al que apunta enviar su fruta, además de informarse del sistema de certificación, donde, afirma, aún hay carencias que subsanar.

El seminario concluyó con la presentación del consultor Felipe Rozas quien también se refirió a la ?Situación mundial de la fruta orgánica?, haciendo un completo análisis de mercado y destino de la producción de las principales frutas orgánicas en Chile y que agrupa a cerezas, arándanos, manzanas, avellanas y frambuesas.

INIA